jueves, marzo 22, 2007

NUEVA CASA, NUEVO ESTUDIO

Hace casi un mes que mi sobrino Carlos y yo, fuimos a ver una casa que años atrás nos interesaba a Óscar y a mí: ---...Está deshabitada, ¿por qué no vas a ver si la rentan?--- me dijo Óscar, así que fuimos a checarla y efectivamente, estaba deshabitada pero con un pequeño detalle: en la fachada colgaba un anuncio de "SE VENDE".
Hablamos a la inmobiliaria nada más por curiosidad para saber cuanto pedían ---dos millones y medio a tratar--- nos dijeron.
---¿Y se puede ver?--- preguntamos, --- Sí, en una hora... Así comenzó nuestra aventura.
Comenzamos a ver otras casas que se rentaban e hicimos citas para verlas y pedimos informes durante esa mañana, todo fluía... de pronto "me cayó el veinte": ---Oye, ¿y para qué estamos viendo casas si no pensamos cambiarnos--- le dije a Carlos.
---Pues ya hicimos las citas--- me contestó despreocupado y nos encogimos de hombros.
Entre estas casas había una que nos llamó la atención y fuimos por Oscar.
---Mi amor, ¿quieres venir a ver la casa, o prefieres quedarte a trabajar?--- le pregunté a Óscar mieentras nos estacionábamos afuera del Estudio.
--- Ahí voy. Me contestó.
Así fuimos a conocer la casa que parecía era buena para nosotros.
En ese lapso, había una inmobiliaria a la que habíamos dejado el recado de que nos llamaran porque queríamos ver una casa que llevaba rato sin rentarse y que estaba ubicada cerca de la casa de mis suegros, (en La Alteña I) pero no recibimos respuesta.
Ya en la noche, que suena el timbre del teléfono: era la señora que nos rentaba la casa.
--- ... Hola Susy, te llamo porque quiero vender mi casa, y como ustedes las están rentando se las ofrezco como primera opción.
--- ¡Uy, Guille!, pero es que no tenemos dinero, la pensábamos rentar dos años más y para ese tiempo poder comprarla, ¿y cuándo la quieres vender, cuando se termine el contrato?
--- Mañana mismo si se puede porque si ustedes no la quieren, tengo un interesado y como nosotros estamos hasta acá (Estados Unidos) pues tengo miedo de morirme y que mis hijos se peleen por la casa, por eso ya quiero venderla.

¡QUÉ COSA! ¡Imagínense! entonces le hablamos a la única opción que teníamos en ese momento, la casa estaba bonita pero un kaboon se dormiría en la sala.
Sin dinero, porque para variar nos debían pagos de trabajos desde el año pasado, conseguimos para rentar la nueva casa, gracias a otro kaboom y el papá de éste: Carlos Bargalló, y también gracias a Carlos Segundo.





Esa tarde, ya íbamos a firmar el contrato con la dueña de esta casa, cuando de pronto recibímos la llamada de la otra inmobiliaria, la que rentaba la casa de la Alteña I para que fuéramos a conocerla.

Y sí, fuimos. Desde que entramos vimos la amplitud y dijimos ¡ÉSTA!, resultó más barata que la que estábamos rentando, más grande, cada K! tiene su espacio vital, y la cocina, (que viene siendo el Estudio de Saday) padrísima, los dueños han querido mantener las cosas originales y están en muy buen estado, y lo que falla, inmediatamente lo mandan arreglar. Es la casa ideal para quedarnos con ella, pero ya se verá más adelante, y si crecen los K!, pue necesitaremos otra MÁS grande, ¡JE!

Inmediatamente negociamos y les comentamos que necesitábamos saber si aceptaban nuestra propuesta porque... y le explicamos nuestra situación.
La aceptaron y que nos hablan de la otra en donde la dueña también aceptaba nuestra propuesta, menos un punto importante para nosotros, así que tuvimos que decidir y nos quedamos aquí.
¿Cómo ven?

Pues aquí estamos, en una aventura más, no hay mal que por bien no venga.


2 comentarios:

Antonio Torres dijo...

que buena onda que todo les haya salido bien susy!!!! vas a ver que todo va salir mejor en esta nueva guarida jejeje
un saludote y cuidate mucho susy Q!!!!!

Susy Romero dijo...

Muchas gracias por tu comentario, Toñin.
Sí, ya comprobamos que fue un muy buen momento para el cambio, aunque forzado pero por algo pasan las cosas.

Un abrazo.